martes, 29 de marzo de 2011

JALÁ

Aprovechemos a comer jalá, que falta poco antes de Pesaj!!!!

Esta receta es muy fácil, para hacerla vamos a necesitar:

1 k. de harina
100 gr. de levadura
2 puñados de azúcar
1 puñado de sal
3 huevos
350 cc de agua tibia
1/2 vaso de aceite
Semillas de amapola

 Mezclamos todos los ingredientes secos, luego la lev., previamente fermentada en agua tibia y con un poquito de azúcar y el aceite. Integramos todos los ing. de a poco hasta formar un bollo, amasamos, dejamos leudar en un lugar cálido y tapado. Le damos forma de trenza. Pintamos con huevo y decoramos con semillas de amapola.
Lo llevamos al horno por 20 minutos aprox.

Si querés podés usar la lev. en polvo, y te evitás el fermento.



miércoles, 16 de marzo de 2011

PURIM

"Mientras todas las festividades pueden desaparecer a la llegada del Mashiaj, Purim jamás desaparecerá, así como leemos (Ester 9:28): ‘Estos días de Purim no caeran en desuso, ni la memoria de ellos se acabara de entre su descendencia...’ ’’ (Midrash Mishle, 9).
Sobrados motivos habrán tenido y sostenido nuestros sabios de bendita memoria para realizar tal afirmación. Pues, al igual que todas nuestras celebraciones, sus costumbres y el recuerdo que ellas generan no deben pasar desapercibidas para ninguno de nosotros. Sin embargo, a Purim le cabe una particular dimensión en el calendario festivo d e Israel. Tal vez porque los opuestos, las contradicciones, la complejidad y el asombro se dan cita en día tan peculiar. Al vez por el raudo pasaje de la oscura muerte a la luz de la vida, o de la insoportable angustia del terror y el llanto a la explosión de la alegría. Meses, días, horas, instantes todos, en fin, donde apreciar no solo la mano del hombre que se levanta contra su prójimo, sino, y por sobre todo, la inmensa bondad de "otra mano" ("Jad Jazaka"): una "mano poderosa que nos llevo —como pueblo y como individuos— a reeditar el milagro y Su salvación.
Será por ello la afirmación. Pues los hechos pertenecen, es cierto, a "baiamim hahem" ("aquellos días"), aunque como Am Israel, nos los encontremos viviéndolos muy a pesar nuestro "en este tiempo" ("Bazeman haze"), al decir de la plegaria...
Un poco de historia...
Purim significa "echar la suerte". En la Persia imperial de Ajashverosh, hace mas de 2.500 años, se echo la suerte para determinar el día en que se exterminaría a todos los judíos del reino, dispersos en su 127 países. "Un pueblo disgregado y disperso en el mundo, que la ley del rey no cumple..." fueron mas o menos las palabras del intolerante de turno. Era un hombre que todo lo tenia. Poder, honor, riquezas, familia...
Pero algo le faltaba: mientras todos los habitantes de Shushan la ciudad capital del reino lo reverenciaban y le rendían pleitesía, y en silencio se sometían a cuanto vejamen el déspota decidía, hubo un judío, tan solo uno, que no lo hacia: Mordejai Halchudi.
Mordejai, el judío en el exilio, integrante del cuerpo social de una nación hebrea alejada de sus fuentes, dispersa en su espíritu, viviendo en la opulencia y en la comodidad. Un pueblo al cual la diáspora le propino el peor de los castigos: el olvido. Había un hombre que no olvidaba. No era judío. Se llamaba Haman. No le preocupaba D-s. Le preocupaba el "pueblo de D-s". El judío Mordejai que se negaba a arrodillarse delante de el...
"...Falsa es la gracia, vana es la belleza..." (Shir haShirim, 31)
La historia de esta fiesta tiene otro nombre propio: Ester. Era una bella mujer. La Tora menciona otras como Sara, Rajel, pero la belleza de Ester dejo su impronta en su destino, un destino que ella eligió. Su especial condición la condujo al palacio real de Ajashverosh, a ocupar el lugar vacante de Vashti, la otrora reina, que decidió rebelarse ante su esposo y rey. Ester habría de ser una reina judía en tierras extrañas.
Sin embargo "...no revelo Ester su origen ni su pueblo, porque así le había aconsejado Mordejai". El judaísmo permanecería oculto, aunque no pasaría a ser una "intriga palaciega". Ester ocultaba su judaísmo...
Será allí, en medio de traiciones y riquezas, de conveniencias y mentiras donde Ester descubra su judaísmo. No dejaría de ser reina. No perdería su belleza. Pero sabría quien era, que era. Y con ello, daría por tierra con aquella terrible y temible enfermedad que se apodero de los judíos de aquel imperio: la enfermedad del olvido, de la cual tambien ella parecio padecer al vivir ya en el palacio real, en las esferas del poder.
La Meguila, que porta su nombre, nos la presenta como una niña huérfana. Su pariente mas cercano, Mordejai —judio deportado en el exilio babilónico— la había criado y cuidado como a una hija. Y aun cuando fue llevada entre las concursantes al puesto, Mordejai fue detras de ella, velando por su seguridad y su destino.
"...Et maamar Mordejai Ester osa" asevera el texto. Ester cumplía con cuanta orden emanaba de Mordejai. Pero la realeza tiene sus cosas. Y el tiempo hace lo suyo. Primero oculto su origen. No sabemos bien por que. Pero sabemos, con seguridad, que mas tarde lo negó.
"...LaIehudim haita ora vesimja, vesason vikar" (de Meguilat Ester). Para los judíos del reino hubo luz y regocijo y honor, narra la Meguila. Todos conocemos la historia y de como fracaso el plan antisemita de Haman. Pero no debemos dejar lugar a las interpretaciones fáciles.
No debemos permitir que mensajes pueriles ocupen el escenario de los hechos. No. Por desgracia, lo siniestro del suceso nos llama a reflexionar. Porque allí, en medio de los festines y borracheras palaciegas ("ketob leb hamelej baiain"), descubre Ester —a instancias de Mordejai— quien es ella, cual es su verdadero lugar y por quien deberá levantar las banderas de la libertad, el orgullo y la dignidad.
Allí es donde Ester "se juega". Frente al rey y a su demoníaco ministro Haman, quien astuto y vil, se aprestaba a colgar a Mordejai de la horca especialmente preparada en su propia casa... ¿Sarcasmo o brutalidad? Allí será, decíamos, donde Ester se despoja de sus vestidos de reina. Será allí donde los "velos" se corran y asome la verdad, desgarradora y acusadora: "...ish tsar veoieb, Haman hara haze..." "Un hombre enemigo y que odia, Haman, es ese malvado..." Ester tuvo valor, sin lugar a dudas. Supo en su momento conquistar el corazón de un rey y de toda su corte. Ahora era tiempo de abrazar al pueblo hebreo y a su propia historia.
Fue la primera fiesta de Purim. Ya no del "sorteo" y del exterminio. Purim se transformaba en la fiesta de todo un pueblo, a partir de Ester, aquella jovencita sensual, obediente, sumisa, bella... la que ahora no tuvo reparos en identificar delante del soberano a "mi pueblo" y "mi vida".
"Nistera darki meim HaShem". Ocultos son los caminos y los designios del Todopoderoso, dice el autor, y no todos me son comprendidos.
Mordejai y Ester comenzaban a ver, a develar el profundo sentido de esta historia: Ester no había llegado al trono para su propia gloria y honor. No era solo belleza. Llego a lo "mas alto" para ascender un peldaño mas: erigirse sobre la infamia y la impunidad del poder, del odio y de la intolerancia, para salvar a su pueblo, para identificarse con su pueblo. Es entonces cuando la oscuridad de la muerte cede ante el despuntar de la vida, cuando se disipan las tinieblas de la tenebrosa senda de la muerte ("gue tsalmavet") para descubrir Su Bondad, la de D-s, cada mañana, cada día, a cada paso de la historia que hacemos en nuestros y en los otros días.
Es entonces cuando para los "iehudim" hubo luz, y alegría, y regocijo, y honor. Porque cuando vencemos al olvido, vencemos a nuestro peor enemigo.

La fiesta de Purim es el 14 de Adar y es en recuerdo a la salvación de los judíos en la época de Hajshverosh (fines del siglo 5 A.E.C). Aman pensó aniquilar a los judíos el 13 de Adar con el permiso del rey y sucedió lo contrario. Su pensamiento perverso lo llevó a su propia destrucción: en ese mismo día los judíos pelearon contra sus enemigos y realizaron el 14 de Adar un día de fiesta y banquete. Los judíos de Shushan continuaron con la guerra durante el día 14 y realizaron la fiesta y el banquete el 15 de Adar


En todo Israel y en la Diáspora se festeja purim el 14 de Adar, excepto Jerusalem  y otras ciudades antiguas que son como la capital Shushan o cualquier ciudad de la tierra de Israel que estaba amurallada desde la época de Ioshua Bin Nun, se festeja Purim el 15 de Adar. En la época de los eventos de Purim los sabios decidieron otorgar honores a la tierra de Israel que se encontraba desolada por el exilio de Babilonia.
La fiesta lleva el nombre del "pur" que es el sorteo que realizó Aman para fijar en que mes debería exterminar a los judíos.
Dos fiestas fueron fijadas por nuestros sabios: Januca y Purim. La diferencia entre ellas en que Januca fue una lucha espiritual, salvar al pueblo de Israel del helenismo por eso los preceptos de la fiesta son pronunciar el Halel y encender las velas, y en la fiesta de Purim se encontraba el peligro de un extermino físico, por eso los preceptos de la fiesta están expresados de manera material: banquete de Purim, regalos comestibles a los amigos y regalos para los pobres.

El ayuno de Ester:

En vísperas de Purim, 13 de Adar,  se ayuna desde la madrugada hasta concluir la lectura de la meguila en la noche - en recuerdo al ayuno que duró tres días el cual Ester llamó a todos los judíos de Shusan a unirse a ella y a sus doncellas. (Ester 4:17). Este ayuno se llama el ayuno de Ester.

La lectura de la Meguila:

La Meguila se lee dos veces - una por la noche y otra por la mañana.
La Meguila se lee de un rollo de pergamino, el cual fue escrito por un sofer stam, como un libro de la Torá, se debe escuchar la lectura de la meguila en su totalidad, por eso debe el oficiante tener cuidado y procurar que en aquellas porciones que se recuerda el nombre de Aman el maldito en medio de un gran ruido (la lectura se ahoga en el ruido), de esperar hasta que reine el silencio para continuar, y sino deberá volver y leer las palabras que fueron ahogadas por el ruido.

Regalos comestibles y donativos a los pobres: 

Este precepto está escrito en la Meguila. Su esencia es de aumentar amor, amistad y compañerismo dentro de Israel. Es deber mandar por lo menos dos regalos conteniendo comidas preparadas para el consumo.

Donativos a los pobres:

Se deben dar dos regalos a dos pobres. No existe la necesidad de dar comestibles sino es aconsejable dar un donativo monetario, pues los pobres prefieren recibir dinero y no comestibles. Es aconsejable dar más en donativos para los pobres más que en el banquete de Purim y en los regalos a los amigos, pues no existe mayor y más noble alegría que regocijar a los pobres, a los huérfanos, a las viudas y a los extranjeros. El que alegra a esos desdichados sigue le ejemplo de D's, como está escrito: "Aviva el espíritu de los humildes y anima el corazón de los afligidos" (Isaias 57:15).

El banquete de Purim:

Los días de Purim se fijaron como días de banquete y de alegría, se debe realizar un banquete honroso el día de Purim luego del mediodía. En este banquete debemos acrecentar en vino hasta estar un poco alegres de más. El motivo de esto es que el vino fue la fuente del cambio: el banquete de Vashti trajo consigo la elección de Ester como reina, y el banquete de Hajashverosh fue el que causó la derrota de Aman y la ascensión de Mordejai. Es por eso que se debe alegrarse de más, hasta no poder diferenciar entre "el maldito de Aman" y el "bendito Mordejai".

La lectura de la Torá: 

Se debe leer la lectura de "Y vino Amalek y luchó contra el pueblo de Israel" (Exodo 17), pues Aman era de la simiente de Amalek, como Amalek que salió a la guerra de una manera imprevista contra Israel.
"Al Hanisim" se recita en la oración de Shmona Esre y en la bendición después de las comidas. Esta oración demuestra la grandeza del milagro de Purim.
la plegaria  es pronunciada el día de la fiesta: “En los días de Mordejai y Ester, en Susán la capital, se alzó contra éstos  Amán el malévolo. Intentaba destruir, asesinar y aniquilar a todos los judíos...   Pero Tú, con tus múltiples piedades, confundiste su idea, frustrarte su pensamiento, trajiste el castigo sobre su cabeza, acabando él y sus hijos en la horca”. 
Purim tiene también sus comidas tradicionales, “Oznei Amán” – masas en forma triangular,  rellenas de semillas de amapola, dátiles, ciruelas secas, etc. La tradición popular sostiene que la forma triangular imita el sombrero que usaba Amán.  Padres y familiares acostumbran dar a los niños Demei Purim, dinero de Purim, monedas o fondos de regalo.


En Purim se acrecienta la alegría y el goce. Distintas costumbres se agregaron a Purim con el correr de las generaciones. Una de ellas son los disfraces. ¿Porqué nos disfrazamos en Purim? Una de las explicaciones es que está escrito en la meguila "y muchos habitantes de la tierra se judaizaban": muchos de estos gentiles que deseaban exterminar al pueblo de Israel bajo la orden de Aman y Hajashverosh, se judaizaron es decir se vestían como judíos "Porque el temor a Mordejai había caído sobre ellos". Sin lugar a dudas los disfraces vienen a demostrar el motivo central de esta fiesta - "y se invirtió", y es una de las expresiones de alegría de Purim.